Caravaca de la Cruz, cabecera de la Comarca del Noroeste Murciano, es un foco de atracción parmente por su impresionante legado monumental que la convierte en una de las ciudades ciertamente, más monumentales de la Región de Murcia, pos sus parajes naturales de gran belleza, por su rica gastronomía, por sus singulares festejos ( Fiestas de Moros, Cristianos y Caballos del vino, Declaradas de Interés Turístico Internacional) y, sobre todo, por esa cruz de doble brazo, conocida por toda la cristiandad, a la que tanta fe profesa este pueblo de Caravaca y tantas y tantas personas que hasta él peregrinan por devoción a Ella. Devoción que ha sido reconocida por la Santa Sede a Perpetuidad y cada siete años siendo el primero de ellos en 2003, y que convierte a Caravaca de la Cruz en una de las cinco únicas ciudades que poseen tal distinción en el Mundo.
Historia.
En lo que hoy se constituye su término municipal, encontramos en el paleolítico los primeros vestigios de población humana. A partir de este momento, otros pueblos y otras culturas se van a ir instalando en ella; diversos yacimientos argáricos, ibéricos y romanos así lo atestiguan. Sin embargo, no podemos halas de Caravaca como núcleo urbano hasta la plena época de dominio musulmán en la península. Fue villa de la Orden del Temple hasta 1392 y, posteriormente, de la Orden de Santiago.
En el período medieval se configura el primitivo trazado urbanístico de la ciudad, limitado por el cerro del Castillo, y de este momento es también el origen de la tradición de La Aparición de la Stma. y Ver Cruz, Patrona de Caravaca. La conquista del reino de Granada supone un auge económico, social y demográfico importante. No obstante, el punto álgido del desarrollo político y económico lo alcanza a lo largo del siglo XVIII, favorecido en gran medida por la exportación de cereales y cáñamo.
Actualmente, el carácter emprendedor de su población ha hecho que Caravaca experimente un ritmo de crecimiento muy dinámico, con amplios equipamientos, gran parte de ellos de carácter comarcal.
La Cruz de Caravaca
La Stma. Cruz de Caravaca es una cruz de origen oriental y aspecto patriarcal, por tanto de doble travesaño o cuatro bazos. Se cree que perteneció al patriarca Roberto de Jerusalén que fue el primer obispo de dicha ciudad una vez conquistada a los musulmanes en la primera cruzada. En Caravaca de la Cruz, la santa reliquia, se venera desde el siglo XIII, concretamente en torno al año 1231 en que según la tradición se fecha el milagro de su aparición. Que se fundamente y se exteinde por los limosneros y romanceros la tradición de la misteriosa Aparición de la Cruz, al inicio de la misa del sacerdote prisionera Pérez Chirinos, en presencia del sayid musulmán Abu- Zait y de se corte, la cual motivó su conversión al cristianismo, simbolizando la narración de la Caída del poder almohade en Al-Andalus.
Esta tradición ha marcado la mentalidad y trayectoria histórica de la ciudad, mencionándose siembre la Cruz misteriosa, oriental, pectoral y fronteriza en este enclave castellano del Adelantamiento de Murcia durante 250 años, hasta la toma de Granada en 1492, custodiada por la órdenes militares del Temple y Santiago.
La Cruz de Caravaca es un “Lignum Crucis”, es decir, un tozo de madera perteneciente al leño donde fue crucificado Cristo, conservado en un relicario en forma de cruz de doble travesaño. Esta Cruz, desde ataño ha sido reconocida por la Iglesia Católica como “Vera Cruz” (Verdadera Cruz), otorgándosele bulas e indulgencias a los peregrinos que iban a adorarla. Asimismo la Iglesia le concedió en 1794 el Culto de LATRÍA (equivalente al que recibe el Santísimo Sacramento).
Desde el 9 de Enero de 1998, el templo de Caravaca de la Cruz goza del privilegio otorgado por la Santa Sede de ser Cuidad Santa y celebrar un Año Jubilar “In Perpeetuum” (para siempre). Desde el año 2003, la actual Real Basílica-Santuario de la Santísima y Vera Cruz de Caravaca es lugar permanente de Peregrinación.
Esta concesión otorga, entre otras, “Indulgencias Plenarias”, a los fieles y peregrinos que visiten la Basílica- Santuario de la Stma. y Vera Cruz de Caravaca, “siempre que por devoción se peregrine en Grupo, una vez al año, en el día que libremente se elija por los fieles”, cumpliendo las condiciones establecidas por la Iglesia. Este acontecimiento ocurre en tan solo 3 lugares del Mundo que son Roma, Jerusalén y Caravaca de la Cruz.
Cultura.
Nuestra ciudad cuenta con un legado monumental de primer orden (uno de los mayores de la región); en una de las varias colinas que hoy ocupa el casco urbano está la Historia viviente. Es un Castillo del siglo XII, reconstruido en el XV por lo caballeros templarios. Culmina en una amplia explanada donde se levanta majestuoso el Santuario de la Vera Cruz, construido entre los siglos XVII y XVIII. La Basílica -Santuario de la Vera Cruz de Caravaca, este se encuentra situado en la cima de un montículo amurallado, visible desde puntos distantes del enclave urbano, erigiéndose en un lugar excepcional y un enclave de referencia. Constituye el núcleo más importante de la ciudad por su significado histórico, cultural y religioso. A la explanada del Santuario de accede desde la Cuesta del Castillo.
El Castillo se remodelará durante el siglo XVII para albergar el Santuario. El templo actual fue erigido a partir de 1617, sobre la base del primitivo de la Vera Cruz, siendo el autor de la traza el arquitecto carmelita Fray Alberto de la Madre de Dios. Las obras dieron comienzo el 16 de julio.
El bastión más moderno, la muralla, está datado en los inicios del siglo XIX, coincidiendo con la Guerra de la Independencia.
El 18 de marzo de 1944 es declarado Monumento Histórico Nacional.
El santuario edificado en el siglo XVII en el interior de la antigua fortaleza medieval levantada por los musulmanes, tiene entrada por una puerta situada en la muralla que mira hacia poniente. Esta, recientemente restaurada, es de plata irregular y rodea el recinto, conservando catorce baluartes y torreones de época medieval, el más elevado de los cales se halla en la parte Este y se conoce con el nombre de Torre Chacona.
El Museo de la Vera Cruz está ubicado en la tradicional Casa del Capellán, en el Santuario de la Vera Cruz, y se compone de tres salas dedicadas a la historia de la Sagrada Reliquia, al ajuar litúrgico y a la arqueología del Santuario. Su colección básica procede del antiguo Museo de Arte Sacro e Historia de la Vera Cruz.
En el sótano del museo encontramos restos arqueológicos de las murallas, torres y mazmorra del antiguo castillo medieval que existió bajo la actual iglesia y museo. También se ha recuperado el foso de la Guerra de la Independencia, los grandes aljibes medievales y las torre de las Toscas.
Así mismo, sonde destacar:
La Iglesia Parroquial de El Salvador, la historia de la construcción de este monumento podría dividirse en dos etapas; en un primer momento, entre 1524 y 1536, en el que se trató de sacar partido de la parroquia ya existente, ampliándola y reedificándola; y la segunda etapa desde 1537 a 1595, correspondiente a la traza y edificación de la nueva iglesia, en distinto solar y con diferentes características que la anterior. Aunque artísticamente no existe relación entre ambos templos, los problemas surgidos con los artistas y su recuperación en los primer años de la obra exigen el estudio del tema desde 1524, cuando se planteó la idea de construir una iglesia más amplia.
Calle de las Monjas durante el siglo XVIII, cuando Caravaca de la Cruz alcanzo su mayor desarrollo urbano, gracias a un impulso económico destacable se puede observar, donde a un lado y otro de la calle son varias las casas blasonadas con monumentales portadas principales que servían para dar a conocer el poder de las grandes familias ilustres del momento.
Monasterio de las Monjas Claras. La obra es del siglo XVII, época de austeridad en las construcciones monacales. Su construcción dio comienzo en 1609 a expensas del fundador Ginés de Perea, vecino de Caravaca y Notario del Tribula de la Inquisición del Reino de Murcia.
De lo más destacado del monasterio, mencionaremos la fachada del mismo, de sillería del siglo XVII con puerta claveteada de 1876. Por lo demás, se caracteriza por la austeridad propia de un convento de clausura que hoy en día siguen habitando.
Parroquia de la Purísima Concepción, El edificio formaba parte del conjunto monumental constituido por el desaparecido hospital y el propio templo. Se puede afirmar que hacia los años 1532-1533, las obras llegaron a iniciarse, pero no sería hasta varios siglos después cuando se viese por fin concluida de este templo.
La iglesia de la Concepción pertenece al tipo de ermitas, parroquia y santuarios que surgieron fuera de los primitivos cascos urbanos, a extramuros de las poblaciones y que, al transcurrir el tiempo con su consiguiente aumento demográfico, quedaron integradas dentro del entramado urbano. Es de estilo mudéjar con techumbre de madera ricamente decorada, las zonas principales en las que se divide el edificio son la Capilla Mayor, la Capilla de San Juan de Letrán, la Capilla llamada de Cristo, el coro y la torre llamada “de los Pastores”, por servir de referencia a éstos cuando conducían sus rebaños a abrevar y pastar.
Convento de los Padres Carmelitas y la Iglesia de Ntra. Sra. del Carmen. La fundación del monasterio de Frailes Carmelitas Descalzos de Caravaca tuvo lugar en 1586, con la intervención directa del propio San Juan de la Cruz. Tuvo una azarosa existencia, siendo entre otras cosas desamortización en el siglo XIX y utilizado como colegio y hospedería en el XX. Señalar que el convento de Ntra. Sra. del Carmen o Santísima Virgen del Carmen actualmente se encuentra totalmente rehabilitado y se ha convertido en una hospedería Religiosa, manteniendo al mismo tiempo la función residencial de la comunidad religiosa y los actos litúrgicos.
Templete o Bañadero. Se trata de un edificio de estilo barroco y de plata hexagonal inscrita en una circunferencia. Su construcción se inició en 1765, sobre el solar de la capilla anterior, y concluyó en 1801. Es obra del arquitecto murciano José López.
Se distinguen en su construcción cuatro cuerpos: el pódium, en el que se apoya el edificio y del que sobresalen los pilar, el cuerpo principal que cierra el espacio y configura el monumento, la cúpula sobre tambor cubierta de teja árabe, la linterna dotada de seis vanos.
Este edificio también es conocido como el Bañadero, aludiendo así al acto ritual que cada 3 de mayo de se realiza en él, desde 1384, donde se baña la Santísima Cruz bendiciendo las aguas que luego regarán la huerta caravaqueña.
El ayuntamiento de Caravaca, en el siglo XVIII el Concejo de Caravaca vio la necesidad de buscar un nuevo emplazamiento. Hasta el momento la Casa Consistorial estaba ubicada en el barrio medieval. En 1737 se acordó la construcción del edifico, obra de Jaime Bort (arquitecto principal del Inmafronte barroco de la Catedral de Murcia), aunque su trazado original fue modificado por Fray Juan de Santa Teresa y por Juan García. Finalmente la ejecución corrió a cargo de un gran maestro de obras, nacido en Caravaca, Antonio del Campo.
El 1743 se inicia la construcción y se concluye en 1762, siendo la primera sesión del Concejo el 3 de enero de 1763.
Dada la trascendencia histórica y artística de este edificio, el 2 de Junio de 1982 cumpliendo los requisitos oportunos, fue declarado Monumento Histórico Artístico.
Plaza de El Arco, este núcleo urbano, declarado Bien de Interés Cultural en su grado más alto, se localiza en una de las zonas más antiguas de esta ciudad. Presidida por la Casa Consistorial del siglo XVIII, también monumento de interés artístico, se puede admirar, en su extremo final, la Iglesia del Salvador.
Como muchas otras plazas de España los acontecimientos históricos obligaron a cambiar el nombre de esta. Todavía hoy se conserva una placa, en la fachada del ayuntamiento, que nos recuerda que en 1812 era llamada Plaza de la Constitución.
La Plaza del Arco la decoran dos grandes momentos que conmemoran las Fiestas de Moros y Cristianos que tienen lugar en Caravaca en Honor a la Santísima y Vera Cruz durante los primeros 5 días del mes de Mayo. El monumento al Moro y al Cristiano de Rafael Pi Belda es de bronce fue erigida en 1983.
Monumento a San Juan de la Cruz, estatua de San Juan de la Cruz caminante como un peregrino más que venía a postrarse ante la Stma. Reliquia de la Vera Cruz, fueron numerosas ocasiones las que visitó la Ciudad de la Vera Cruz, teniendo incluso su propia casa frente al Templete. Fue creada por Rafael Pi Belda en el año 1986, erigido con motivo del IV centenario de la fundación del convento de Carmelitas descalzos.
Museo de la Fiesta , tiene como sede el Palacio de los Uribe, un edificio construido entre los siglos XVI y XVIII. En él se da a conocer el origen de la Vera Cruz y un recorrido cronológico por los cinco días que duran las Fiestas en su honor. La planta baja está dedicada a los caballos del vino y las plantas superiores a los moros y cristianos el origen de su fiesta y su evolución.
Mueso Arqueológico de la Soledad, anteriormente Iglesia de la Soledad. Primera iglesia de Caravaca y parroquia hasta 1571, pues en esta fecha fue transferido el culto a la Iglesia Mayo de El Salvador. Se trata de un templo de la segunda mitad del siglo XVI, asentado posiblemente en el solar de una anterior ermita gótica. Es una iglesia columnaria de tres naves, cubierta con nueve bóvedas vaídas de muy esbeltas y armoniosas proporciones, de planta cuadrada, y tres tramos por nave. Tiene columnas de orden toscano sobre pedestales o plintos.
Mueso de la STMA. VERA CRUZ,El edificio donde se ubica el Museo forma parte de las instalaciones de la Basílica-Santuario de la Stma. y Vera Cruz. Está ubicado en la tradicional Casa del Capellán, y se compone de tres salas dedicadas a la historia de la Sagrada Reliquia, al ajuar litúrgico y a la arqueología del Santuario. Su colección básica procede del antiguo Museo de Arte Sacro e Historia de la Vera Cruz.
El Museo comprende colecciones de orfebrería, pintura y documentos. Dentro de la pinacoteca destacan 6 óleos sobre tabla del siglo XVI, originales de Hernando de los Llanos, pintor que fuera discípulo de Leonardo da Vinci. Cuatro de ellos narran el Milagro de la Aparición de la Cruz.
En orfebrería encontramos la Custodia-Ostensorio de la Cruz , de principios del siglo XVI, regalo del primer Marqués de los Vélez y Comendador de Caravaca, Pedro Fajardo. El Portacruz de los Baños, regalo de Luis Fajardo, segundo Marqués de los Vélez, es otra pieza a destacar. Digna de mención, es la caja-estuche de plata sobredorada donada hacia finales del siglo XIV por el maestre de la Orden de Santiago, Lorenzo Suárez de Figueroa.
Destaca como pieza importante en el Museo la “Casulla de Chirinos”, un tiraz musulmán adaptado a la forma de ornamento litúrgico que se cree portaba el sacerdote Chirinos en el momento de la milagrosa Aparición de la Cruz.
También se ha hecho visitable parte del antiguo trazado del Castillo, recientemente excavado, en donde se puede ver una antigua mazmorra de la época.
El exterior destaca por su carácter de fortaleza y por sus grandes y acentuadas contrafuertes, tanto rectangulares, como circulares en las esquinas. Todo ello de cantería. Una cornisa corrida de ladrillo, de singular belleza, remata el conjunto. Las puertas y ventanas son de estilo renacentista; la lateral del siglo XVII se adscribe al Barroco, aunque con extremada moderación.
En la actualidad carece de presbiterio y coro, éste se levantaba a los pies, desapareciendo en obras de restauración. Tuvo espadaña y no torre, de ladrillo, demolida en 1966 ante el inminente peligro de ruina.
Su patrimonio mueble (retablos, pila bautismal y útiles sagrados que constituían su ajuar) se encuentra repartido, desde el siglo XVI, por otras iglesias de Caravaca.
En la actualidad el templo de la Soledad se ha convertido en Museo Arqueológico local. En la entrada principal destaca el dintel formado por una lápida romana honorífica procedente del Sitio Histórico del Estrecho de las Cuevas de la Encarnación.
CASA MUSEO DE LOS CABALLOS DEL VINO,Ubicada en la casa señorial de la familia Muso Melgarejo, edificio barroco preciosamente restaurado, situado en el casco antiguo de nuestra ciudad, a unos pasos de la Plaza de los Caballos del Vino, escenario tradicional de varios de los actos integrados en esta fiesta singular, única en el mundo, que se celebra el día 2 de mayo. 60 caballos lujosamente enjaezados con piezas bordadas recorren las calles de la ciudad, concluyendo con la tradicional carrera.
En el interior de la Casa-Museo podemos conocer la historia y desarrollo de esta fiesta, propia y exclusiva de los caravaqueños, declarada Bien de Interés Cultural Inmaterial y candidata a ser declarada Patrimonio Cultural Inmaterial de la Humanidad por la UNESCO.
El enjaezamiento de los Caballos del Vino está integrado por múltiples piezas bordadas con seda, pedrería y canutillo de oro y plata, elaboradas a medida para cada uno de los caballos, que se renuevan cada año, y cuyo mérito será, además de su propia belleza y complejidad, el que luzcan perfectas en el animal.
Las piezas expuestas muestran la evolución de los Caballos del Vino a lo largo del siglo XX, desde los sencillos enjaezamientos tradicionales de principios de siglo a base de colchas de novias y otras prendas domésticas hasta los extraordinarios bordados del presente. Diferentes épocas unidas por el sentimiento común que a lo largo de la historia ha mantenido viva la fiesta, animando a las sucesivas generaciones de caravaqueños a trabajar con ilusión para engrandecerla y mejorarla año tras año. Historia mostrada con amor y respeto hacia sus protagonistas, en barrocos bodegones que recrean la grandeza de los Caballos del Vino.
El contenido incluye asimismo diversos audiovisuales que recogen los momentos más importantes de la fiesta, transmitiendo su belleza, fuerza y emoción, destacando el dedicado a su momento culminante: la legendaria carrera de los Caballos del Vino, así como un espacio propio dedicado al futuro de la fiesta, los ponys y sus correspondientes pequeños caballistas, en su exhibición del 3 de mayo.
Museo de musica Etnica. Colección Blanco Fadol,El Museo de Música Étnica, Colección Blanco Fadol, está situado en la pedanía de Barranda del municipio de Caravaca de la Cruz (Murcia). Es un museo temático, que tiene como finalidad presentar a todo tipo de público, las formas, sonidos e información en general sobre instrumentos y músicas del mundo, para que a través de los mismos conozcamos más nuestra propia tradición musical, ya que existe una antigua y estrecha relación entre los instrumentos y las músicas de diferentes culturas que no han sido contempladas con profundidad.
El Museo pertenece a la red de museos autonómicos y se ubicó en Barranda porque esta localidad es, desde hace veinticinco años, el referente más importante en lo que a música tradicional o de raíz se refiere y por la recuperación y mantenimiento de las Fiesta de las Cuadrillas. Es un museo del siglo XXI en el que se han incorporado todas las nuevas tecnologías a través de paneles gráficos, pantallas táctiles y sistemas individuales e interactivos de audio y vídeo.
La exposición ofrece un importante valor organológico y didáctico por medio de reproducciones de instrumentos musicales creados por Leonardo Da Vinci, las innovaciones del maestro Renné Gamboa, o del mismo Carlos Blanco Fadol quién muestra un ejemplo de sus creaciones instrumentales. En estas salas encontramos, junto a los elementos expositivos de los cinco continentes, pantallas interactivas dotadas de auriculares en las que el visitante tiene acceso a la información, el sonido y la imagen visual de los instrumentos que se observan.
Con este tipo de exposición, se trata de preservar un importante legado cultural de la humanidad, ya que a través de los instrumentos musicales se puede también conocer una modalidad de vida, el hábitat, influencias de un pueblo hacia otro, ritos ancestrales, religiosos, etc.
Fiestas y Tradiciones.
En cuanto a Fiestas, sin lugar a dudas las más importantes son las celebradas en Honor a la Patrona, la Stma. y Vera Cruz (del 1 al 5 de Mayo), declaradas de Interés Turístico Internacional. Conmemoran hechos acaecidos en los siglos en que la ciudad fue plaza fronteriza con el Reino Nazarí de Granada. Festejos de moros y cristianos unidos al de los Caballos del Vino (candidatura a Patrimonio Cultural Inmaterial para la UNESCO) constituyen el núcleo de los actos. Etnológicamente los caballos de Vino son los más destacados. Festejo insólito y único en el mundo. Fuerza, belleza y pasión hacen de los Caballos del Vino un festejo inigualable.
En el mes de Septiembre tiene lugar la tradicional Romería de los Caballos del Vino al Paraje Natural de las Fuentes del Marqúes.
La Fiesta de las Cuadrillas, que se celebran en la pedanía caravaqueña de Barranda el último domingo del mes de enero y declara de Interés Turístico Nacional y Bien de Interés Cultural, es una demostración de cultura viva que continúa la tradición secular de las cuadrillas, música, ritos y fiestas de nuestro folklore. La Fiesta de Exaltación de la Vera Cruz, el día 14 de Septiembre tiene, sobre todo carácter religioso.
En 1998, se le concedió por la Santa Sede el título del Año Santo “In Perpetuum”, lo que tiene una gran importancia tanto para Caravaca de la Cruz como para la Región de Murcia.